Sobre la obra
https://valentina-lujan.es/H/hesubidohebajado.pdf
He subido he bajado1 de los cielos al sotano2 más oscuro más lobrego3 de todos cuantos sotanos4 pueda hallar el alma en vuelo5 que batalla y se debate6 y que lucha por salvarse7 de las garras del maligno8 que quiere torcer su sino9 y lanzarla a los abismos10 del horror y del maldito11 infierno de los proscritos12 que se vieron desterrados13 de la casa del Divino14.
He rogado he plañido15 he llorado y he reído16 y he mirado a las estrellas17 por ver si veía algún signo18 de la gloria de la gracia19 y de la bondad que emana20 de las almas de los hombres21 de los cuervos y las ranas22 y de todo cuanto vive23 sobre la tierra que brama24 en demanda de almas puras25 que busquen no mancillarla26.
He lavado he barrido27 la mi casa y me he vestido28 con las galas que me adornen29 del encanto requerido30 para ir a buscar posada31 allá donde no haya nada32 del pavor ni la desgana33 que atormenta en la mañana34 a las gentes que se lanzan35 sin rumbo y sin esperanza36 a la calle por largarse37 de la soledad malsana38.
He buscado y me he perdido39 y hoy encuentro en mi camino40 todos los rumbos queridos41 que soñados y dormidos42 despiertan por darme auxilio43 y llevarme hacia mi sino44 que no será sino el sino45 que aguarda a los descreídos46 que dejaron algún día47 de pensar que no existía48 en la vida más destino49 que una oscura tumba honda50 en un cementerio frío51.
4 de febrero de 2012
Rap
Sobre el creador
Escritora, porque la escritura es lo que profeso. Pero, no siendo la escritura mi fuente de ingresos, no me atrevería a denominarla mi profesión. No creo, por otra parte, que estuviera dispuesta a avenirme a complacer a nadie, lector o editor. Ni a comprometerme a cumplir los plazos de entrega a que deben ceñirse tantos de los que publican. Literatura por encargo, como si el escritor fuera un sastre o un fabricante de electrodomésticos. Me espanta el sólo pensarlo.
No tengo formación académica.
Ah, que se me olvidaba explicar a mis lectores, y a mis seguidores, y a mis amigos y enemigos, por qué "Telas de araña con bastón, canario y abanico"; y ello es por algo tan sencillo como el hecho de que la vida, todas las vidas, son exactamente una tela de araña, entretejiéndose, las unas con las otras.
He de confesar también que el título no se me ocurrió a mí; no. El título es el de un cuadro, grande, al óleo, que vi hace muchos años no recuerdo ya dónde en una exposición y en el que, aunque me dejé los ojos escrutándolo, no logré encontrar ni el bastón ni el canario ni el abanico y que, además y desafortunadamente, no recuerdo el nombre del autor.