“Dicen que el valor de las palabras no radica en quien las dice sino en quien las escucha que es quien las interpreta ¿Ocurre lo mismo con la escritura?”
Hay personas que tienen muy claro desde la infancia que quieren ser escritores; no es mi caso aunque he escrito desde los diez años. Fue una actividad escolar auspiciada por la maestra en donde los textos que entregábamos los ciclostilaban. Al siguiente curso la actividad desapareció y no escribí nada hasta los doce, cuando mis padres me compraron una máquina de escribir y un libro para aprender mecanografía de forma autodidacta, porque no había dinero para pagar una academia que me enseñara. Tan pronto aprendí a colocar los dedos el libro me aburrió y para hacerlo más llevadero comencé a escribir historias que se me ocurrían. Tal fue el comienzo de mi afición por la escritura.
Mi proceso de creación suele ser un primer borrador en el voy escribiendo la historia tal como me viene a la cabeza, el cual posteriormente me sirve de guión para reescribirla de forma más elaborada y concisa. Respecto a mis influencias, creo que cabría destacar a Mika Waltari, Frank Yerby, Vicente Blasco Ibañez , entre otros.
Desde 1992 he publicado en forma de autodedición en Bubok Editorial (https://www.bubok.es) las novelas: «Vidriera Rota» (trilogía compuesta por los libros «Del Regallo al Ebro», «Aguja de marear» y «Dorondón»; «Falta de aire»; «Negror» y «Camino de nada». El ensayo biográfico de «San Macario, patrón de la villa de Andorra». Historia local de Andorra (Teruel) – «Historia de la Muy Noble Villa de Andorra»–, compuesta hasta la fecha de 6 tomos, estando trabajando en el séptimo y último.
Tus creaciones son muy valiosas para nuestra comunidad. Por eso, queremos ponértelo fácil para que las expongas durante mucho tiempo.