Porque la página que usted ve...
06/22/2023
2306224660425

About the work

http://valentina-lujan.es/P/porqlapagqusve.pdf
Porque la página que usted ve en la actualidad es una especie de puzzle que he procurado armar lo mejor que he podido a partir de los papeles que aparecieron en el lugar que debería estar ocupando el pequeño electrodoméstico con el que no pude calentar unos canelones de los que ― creo que en alguna otra parte lo he mencionado ― no quiero nunca más volver a hablar.
Y eso, fíjese, que no puedo quejarme porque ya le conté que cené bastante bien; y, en cuanto a ellos ― los canelones ―, y ya por zanjar el tema de los malditos canelones de una condenada vez, habida cuenta de que calentarlos no era posible, los freí a la mañana siguiente.
Sí; los freí.
Después de echar a perder la mañana sentada frente al ordenador los saqué de uno en uno con una cuchara de su bandejita original, los pasé por harina y los freí.
Y bueno; no resultaron mal. Quedaron como una especie de híbrido entre rollito primavera, empanadilla y croqueta que me comí, luego, a mediodía, sentada en la cocina bastante contrariada ― aunque, ya le digo, estaban ricos y me satisfizo el encontrar para ellos una solución tan sencilla, que le recomiendo porque… pues porque soy bastante chapucera, poco exigente, la verdad, y me conformo en determinadas cuestiones con cualquier cosa hecha de cualquier manera ― porque, decía, bastante, ya lo he dicho, contrariada porque, entonces, todavía, no sabía que terminaría por comprender que lo mejor era dejar las cosas como estaban y que no había nada, nada absolutamente más que hacer excepto, por no desperdiciar también la tarde cruzada de manos como una tonta y ante el hecho consumado de que por más intentos que hice ― antes de renunciar a simplemente tirarlos a la basura y ya está ― tecleando y volviendo a teclear el resultado fue siempre Internet Explorer no puede mostrar la página, tratar, simplemente, de olvidar.
Y olvidé. Un poco como que a regañadientes al principio, pelando una manzana, y con algo más de entusiasmo cuando ― una vez me hube tomado el café y puesto los guantes y vuelto a quitármelos porque estaba convencida de que si había algo de lo que yo estuviera segura en aquel momento en este mundo era de que no tenía ganas ningunas de fregar ― me senté en el suelo firmemente decidida a hacer algo de provecho y, allí, apoyada recuerdo contra la pared, me puse a fumar.
Nadie caiga en la tentación, sin embargo, de imaginar que las cosas fueron tan deprisa o que mi predisposición cambió de rumbo de manera espontánea y natural; no, que tuvieron que pasar muchas cosas y, yo, todos nosotros en realidad, por infinidad de circunstancias que llevarían a que nuestras vidas, y nuestros mundos, y nuestros pequeños universos se fueran enredando, integrándose en, desmembrándose de, hasta convertirse en, unas veces, algo parecido a un puzzle que a saber si acertaríamos a armar, y otras veces en una especie de Juego de la Oca, en el que no resultara posible saber si avanzaríamos o retrocederíamos o nos quedaríamos estancados a la espera de que algún despistado, o algún desdichado, o algún alma caritativa, nos sacase de pozo o laberinto o cárcel o fuera nadie a saber qué.
Etiqueta: Coordenada
Telas

Literary: Other
baulito
valentina luján
telas de araña
Shown in

Creativity declaration

100% human created

Declaration Date: Jun 22, 2023, 6:42 PM

Identification level: Low

Fictional content

Declaration Date: Jun 22, 2023, 6:42 PM

Identification level:
Low

Copyright registered declarations

Valentina Luján
Author
Consolidated inscription:
Attached documents:
0
Copyright infringement notifications:
0
Contact

Notify irregularities in this registration

Print work information
Work information

Title Porque la página que usted ve...
http://valentina-lujan.es/P/porqlapagqusve.pdf
Porque la página que usted ve en la actualidad es una especie de puzzle que he procurado armar lo mejor que he podido a partir de los papeles que aparecieron en el lugar que debería estar ocupando el pequeño electrodoméstico con el que no pude calentar unos canelones de los que ― creo que en alguna otra parte lo he mencionado ― no quiero nunca más volver a hablar.
Y eso, fíjese, que no puedo quejarme porque ya le conté que cené bastante bien; y, en cuanto a ellos ― los canelones ―, y ya por zanjar el tema de los malditos canelones de una condenada vez, habida cuenta de que calentarlos no era posible, los freí a la mañana siguiente.
Sí; los freí.
Después de echar a perder la mañana sentada frente al ordenador los saqué de uno en uno con una cuchara de su bandejita original, los pasé por harina y los freí.
Y bueno; no resultaron mal. Quedaron como una especie de híbrido entre rollito primavera, empanadilla y croqueta que me comí, luego, a mediodía, sentada en la cocina bastante contrariada ― aunque, ya le digo, estaban ricos y me satisfizo el encontrar para ellos una solución tan sencilla, que le recomiendo porque… pues porque soy bastante chapucera, poco exigente, la verdad, y me conformo en determinadas cuestiones con cualquier cosa hecha de cualquier manera ― porque, decía, bastante, ya lo he dicho, contrariada porque, entonces, todavía, no sabía que terminaría por comprender que lo mejor era dejar las cosas como estaban y que no había nada, nada absolutamente más que hacer excepto, por no desperdiciar también la tarde cruzada de manos como una tonta y ante el hecho consumado de que por más intentos que hice ― antes de renunciar a simplemente tirarlos a la basura y ya está ― tecleando y volviendo a teclear el resultado fue siempre Internet Explorer no puede mostrar la página, tratar, simplemente, de olvidar.
Y olvidé. Un poco como que a regañadientes al principio, pelando una manzana, y con algo más de entusiasmo cuando ― una vez me hube tomado el café y puesto los guantes y vuelto a quitármelos porque estaba convencida de que si había algo de lo que yo estuviera segura en aquel momento en este mundo era de que no tenía ganas ningunas de fregar ― me senté en el suelo firmemente decidida a hacer algo de provecho y, allí, apoyada recuerdo contra la pared, me puse a fumar.
Nadie caiga en la tentación, sin embargo, de imaginar que las cosas fueron tan deprisa o que mi predisposición cambió de rumbo de manera espontánea y natural; no, que tuvieron que pasar muchas cosas y, yo, todos nosotros en realidad, por infinidad de circunstancias que llevarían a que nuestras vidas, y nuestros mundos, y nuestros pequeños universos se fueran enredando, integrándose en, desmembrándose de, hasta convertirse en, unas veces, algo parecido a un puzzle que a saber si acertaríamos a armar, y otras veces en una especie de Juego de la Oca, en el que no resultara posible saber si avanzaríamos o retrocederíamos o nos quedaríamos estancados a la espera de que algún despistado, o algún desdichado, o algún alma caritativa, nos sacase de pozo o laberinto o cárcel o fuera nadie a saber qué.
Etiqueta: Coordenada
Telas
Work type Literary: Other
Tags baulito, valentina luján, telas de araña

-------------------------

Registry info in Safe Creative

Identifier 2306224660425
Entry date Jun 22, 2023, 6:42 PM UTC
License All rights reserved

-------------------------

Copyright registered declarations

Author. Holder Valentina Luján. Date Jun 22, 2023.


Information available at https://www.safecreative.org/work/2306224660425-porque-la-pagina-que-usted-ve-
© 2024 Safe Creative