Cuando no has conocido más que miedo desde que llegaste al mundo, cuando no puedes confiar en lo que te rodea ni en aquellos con los que compartes cada día, cuando sabes que todos siguen un guion que a ti se te oculta para que tu terror, tu pena e incluso tu desesperación sean genuinas, llega un momento en el que tienes que decidir si es esto lo que quieres para el resto de tu vida o si vas a dar un salto hacia lo desconocido. Arriesgarse lleva incluida la posibilidad de perder, pero ¿qué puedes