Una investigación realizada por dos universidades británicas concluye que el uso de la inteligencia artificial (IA) generativa por parte de los escritores incrementa su creatividad individual, pero también tiene efectos negativos sobre la originalidad de las obras creadas. El estudio, publicado en la revista Science Advances, involucró a cerca de 300 participantes, divididos en grupos para escribir microrrelatos dirigidos a un público adulto joven.
El estudio realizado por Anil Doshi, profesor de estrategia en la Universidad Londres, y Oliver Hauser, codirector del Instituto de Ciencia de Datos e Inteligencia Artificial en la Universidad de Exeter (Reino Unido), se produce en un momento de crecientes temores sobre el impacto de las herramientas de IA. Éstas, cada vez son más accesibles y capaces de convertir indicaciones textuales simples en piezas de música, arte y escritura relativamente sofisticadas.
Los relatos asistidos por IA son más similares entre sí
El experimento de los investigadores muestra que, aunque la IA puede aumentar la creatividad individual, los relatos asistidos por IA contienen más similitudes entre sí y son menos variados y diversos. «Si el sector editorial adoptara más historias inspiradas en la IA generativa, nuestros resultados sugieren que las historias producidas serían menos únicas en su conjunto y más similares entre sí», aseguran los autores del estudio.
Cerca de 300 voluntarios participaron en el estudio
Para la investigación, Doshi y Hauser reclutaron 293 voluntarios como «escritores» a través de la plataforma de investigación Prolific. Se evaluó su capacidad creativa a través de una prueba en la que debían proporcionar diez palabras lo más diferentes posible entre sí. Los seleccionados se dividieron al azar en tres grupos y se les pidió que escribieran una historia de ocho frases para jóvenes adultos sobre uno de estos tres temas: una aventura en la selva, en alta mar o en un planeta diferente.
Más del 88% de los participantes que podían utilizar la IA, aprovecharon la ayuda
El primer grupo realizó el ejercicio con sus propias ideas sin recibir ayuda de la IA, el segundo tuvo la posibilidad de obtener una sola idea utilizando el modelo GPT-4 para escribir la historia, mientras que tercero pudo consultar hasta cinco ideas en el modelo de IA. El 88,4% de los participantes que podían recibir ayuda de la IA la aprovecharon. Al finalizar la prueba, se les pidió que evaluaran la creatividad de sus historias antes de que otras 600 personas las revisara atendiendo a los mismos parámetros: características estilísticas, la novedad que suponían y el potencial que tenían de publicarse como un libro.
Las historias creadas con apoyo de IA eran más creativas y amenas
Los autores descubrieron que los escritores con mayor nivel de acceso al modelo de IA mostraban mayor creatividad, hasta en un 10%, y sus historias eran más amenas. En particular, mejoraban la estructura y los giros de la trama. De ellos, los más beneficiados fueron los escritores que habían obtenido una puntuación menos creativa en la primera prueba.
Los participantes que ya eran creativos no obtuvieron beneficios por usar la IA
Sin embargo, las historias producidas por escritores que ya eran creativos no obtuvieron el mismo impulso. «Observamos un efecto de nivelación en el que los escritores menos creativos obtienen los mayores beneficios, pero no apreciamos ningún tipo de beneficio en las personas que ya son intrínsecamente creativas», ha indicado Doshi.
Los escritos de humanos sin apoyo de la IA eran más originales
Los investigadores percibieron que las historias creadas por modelos de inteligencia artificial eran menos originales en comparación con las de los participantes humanos. Una conclusión lógica de este hecho es que, si las industrias editorial y cinematográfica adoptan ampliamente la IA generativa, existe el riesgo de que los libros y películas del futuro se vuelvan más uniformes y similares entre sí.
Hauser subraya la importancia de analizar tanto las capacidades como las limitaciones de los modelos de IA, al mismo tiempo que se evalúa el impacto que esta cambiante tecnología podría tener en la sociedad y la economía. «Que una tecnología tenga el potencial de ser transformadora no garantiza que lo sea», señala.
Fuentes: Sciencie Advances, MIT Technology Review, AFP