La Oficina de Derechos de Autor de Estados Unidos (USCO) ha denegado una excepción a las normas de la Ley de Derechos de Autor en la Era Digital (DMCA) para respaldar el acceso remoto a videojuegos fuera de catálogo.
La Fundación para la Historia de los Videojuegos (VGHF, por sus siglas en inglés) y la Red de Preservación del Software realizaron esta petición para que las bibliotecas, archivos y museos pudieran prestar de forma temporal copias virtuales en remoto para investigaciones académicas.
Duro revés de la Oficina de Copyright a los historiadores de videojuegos
La decisión de la USCO se acoge a que bajo las actuales normas antielusión de la Sección 1201 de la DMCA estas instituciones «no pueden romper la protección de copia de los juegos para hacerlos accesibles de forma remota a los investigadores». Para los historiadores y estudiosos ha sido un duro golpe, puesto que se ven obligados a desplazarse a grandes distancias para acceder a copias físicas, a menudo raras, para realizar sus investigaciones.
Además, la sentencia tiene importantes consecuencias para la conservación y el estudio de los videojuegos, ya que podría dejar importantes lagunas en la comprensión y documentación de la historia de los videojuegos.
Un estudio revela que es casi imposible acceder a juegos anteriores a 2010
Según recoge Gizmodo, la mayoría de los videojuegos de los últimos 50 años están «legalmente muertos» porque preservarlos se ha vuelto cada vez más difícil. De hecho, un estudio realizado por la VGHF el año pasado desveló que el 87% de los videojuegos anteriores a 2010 ya no están disponibles en el mercado, por lo que son prácticamente inaccesibles por vías legales.
El uso solicitado podría constituir una infracción de copyright
Shira Perlmutter, registradora de Derechos de Autor y directora de la USCO, en su dictamen ha señalado que los defensores de la preservación de los videojuegos no han demostrado que el uso solicitado no constituya una infracción de copyright. Se recoge así la postura de la Asociación de Software de Entretenimiento (ESA, en inglés) y otros grupos de la industria, que afirmaban que el acceso remoto propuesto podría perjudicar potencialmente al mercado de reediciones de juegos clásicos, informa TechSpot.
Parte de la industria ve un daño para el mercado de los videojuegos clásicos
La ESA, que representa a los editores de videojuegos, ha argumentado que la gente aprovecharía las bibliotecas para jugar gratis, que dañarían el mercado de los videojuegos clásicos y que los conservacionistas no tenían «restricciones apropiadamente diseñadas para garantizar que los usos se limitaran a la enseñanza, la investigación o las becas», como informa The Verge. Mientras que los conservacionistas han alegado que la gran mayoría de los juegos nunca se relanzan en ninguna forma, y que los que lo hacen generalmente se modifican o remasterizan de maneras que los hacen menos valiosos para el estudio».
El fallo obliga a los historiadores a explorar métodos extralegales
Ante el dictamen, la VGHF ha realizado su propia declaración lamentando que los grupos de titulares de derechos sigan frenando el progreso. Durante una audiencia, la ESA declaró que «nunca apoyaría el acceso remoto a juegos con fines de investigación bajo ninguna condición», postura que los conservacionistas tachan de «absolutista» y aseguran que «obliga a los investigadores a explorar métodos extralegales para acceder a la gran mayoría de videojuegos descatalogados que, de otro modo, no estarían disponibles».
No obstante, la fundación ha anunciado que no va a abandonar la lucha y ha prometido seguir abogando por un mayor acceso a los videojuegos y por más facilidades legales para su conservación. Esta es la cuarta ocasión, desde 2015, que la autoridad estadounidense de derechos de autor rechaza una solicitud de este tipo. Sin embargo, como las normas de exención de la DMCA se someten a un proceso de renovación trienal, podrá volver a solicitar esta exención en 2027.