En muchas de las charlas, mesas redondas, debates y clases relacionadas con el mundo de la traducción en las que he tenido la suerte de participar suele haber algunos traductores indignados con un tema muy concreto: ¿Qué necesidad tienen los clientes de usar a empresas que van a cobrar más para hacer de intermediarias y pagar menos a los traductores en lugar de contactar directamente con los lingüistas?
No me escondo, yo pensaba lo mismo en mis tiempos como traductor autónomo y era un asunto que me frustraba. Sin embargo, como gestor de proyectos en una empresa de localización, he podido ver otra perspectiva.
La respuesta corta a la pregunta sería: es más cómodo y es más práctico para el cliente. No soy partidario de usar metáforas, pero imaginemos que tienes un terreno en el que construir una casa desde cero. ¿Qué harías? ¿Contactar y contratar por separado a los excavadores para que se encarguen del movimiento de tierras, arquitectos, albañiles, carpinteros, fontaneros, electricistas y un largo etcétera de manos? ¿O acudir a una promotora para que se encargue de todo? Quizá pagues más, pero te ahorrarás quebraderos de cabeza. Ahora imagina que no es solo una casa, sino varias y en distintos países.
Las ventajas de contratar el pack completo
La metáfora no es precisamente sutil, pero la explico. En el mundo de la localización, la traducción puede que sea uno de los pasos más importantes con diferencia, pero no lo es todo. Hablamos de que además de traducir y revisar adaptando culturalmente, también hay en ocasiones una labor de QA (Quality Assurance). Ésta consiste, básicamente, en una segunda revisión. Se adaptan los guiones para doblaje, el proceso de doblaje en sí, se revisa lo doblado (QA de audio)… incluye también la gestión de las memorias de traducción, testeo del juego y un largo etcétera. Lógicamente, a un cliente siempre le convendrá contactar con una compañía que le ofrezca el pack completo en lugar de tener que buscar a varias personas para cada paso y para cada idioma.
¿Y por qué no crear un equipo interno para hacer todo eso directamente? Porque no es sostenible pagar un sueldo a todos los eslabones de la cadena para unos pocos juegos.
Hay que tener en cuenta que las empresas de localización no trabajan para un solo cliente, sino para varios, lo que asegura tener un trabajo constante para todas esas personas. Pero no se puede tener en plantilla a tanta gente para un solo juego; no sería rentable. Por supuesto que habrá algún caso específico en el que un estudio puede dedicar todos sus recursos a un solo juego y sacarlo todo de forma independiente… pero no me he encontrado con ninguno aún.
El problema del anonimato y las preocupaciones de los project managers
El anonimato de los traductores (contra el que se está intentando luchar gracias al movimiento #TranslatorsInTheCredits) también hace que un cliente prefiera no arriesgarse a contactar con autónomos. Hay juegos de infinitas temáticas y utilizar los servicios de una empresa de localización con multitud de lingüistas en sus filas les da más garantías. Los PM (project managers) a cargo del proyecto tendrán más fácil elegir a un equipo de traductores de calidad ya demostrada y con especial interés o habilidades para encargarse de su juego. Ya que para algo gran parte de su trabajo es conocer a los traductores a los que contacta.
Hablando de los PM, la gestión de proyectos también juega un papel crucial en esta decisión. Las empresas de localización disponen de equipos dedicados a coordinar y supervisar cada aspecto del trabajo, que negocian unos plazos de entrega y se encargan de que se cumplan y se encargan de que se mantenga una comunicación fluida. Si un traductor no cumple unos estándares de calidad o de entrega requeridos, no es el cliente el que tendrá que apagar ese fuego, sino el PM. Si alguien se va de vacaciones, no es problema del cliente, sino del PM.
Qua haya un grupo de profesionales detrás de un proyecto genera una tranquilidad y seguridad que pueden ser difíciles de obtener al contratar a un traductor autónomo. Los clientes tienden a confiar más en un equipo que puede garantizar la calidad y la entrega a tiempo.
Conclusión
No pretendo con esto que los traductores se desanimen y dejen de mandar sus currículums a los clientes directamente, en absoluto. Se puede dar el caso de que sí decidan ir directamente con ellos. O puede pasar, y esto es algo más habitual, que el cliente pida traducir su juego a la empresa de localización pero solicite expresamente que se contacte con alguna persona en concreto para la traducción. Sin embargo, asumámoslo, casi nunca nos conocen si no hemos trabajado con ellos antes o ha habido un boca a boca especialmente bueno.
En definitiva, que los clientes tiendan a preferir empresas de localización en lugar de traductores autónomos se basa en la comodidad y la eficiencia. Al optar por un servicio integral, los clientes evitan la complejidad de gestionar a múltiples personas, lo que les ahorra tiempo y esfuerzo, aparte de que las empresas de localización ofrecen en teoría garantía de calidad y cumplimiento de plazos.