El mundo de la creación digital sigue agitado. La última razón ha sido la redacción de los nuevos Términos de Uso utilizados por Adobe Photoshop, en los que se interpretó que la aceptación por parte del usuario daba acceso a todo el contenido creado a través de este popular software, incluso los de uso privado. Un condicionado que para muchos es una invasión de sus contenidos y que ha requerido de una explicación de la empresa para aclarar la situación.
El anuncio no es nuevo, de hecho, la nueva política de Términos de uso tiene fecha de 17 de febrero de 2024, pero es ahora cuando las redes han empezado a comentar lo que implica su aceptación.
Muchos de sus 20 millones de usuarios quedaron estupefactos ante las nuevas condiciones de los ToS (términos de uso): la redacción incluía otorgar un permiso para acceder a todos los contenidos realizados con la herramienta, también a los de trabajo interno. Pongamos por ejemplo, los bocetos de los protagonistas de un videojuego antes de presentarlo a la productora. Muchos profesionales trabajan bajo contratos de confidencialidad que serían incompatibles con lo que parecen implicar los términos:
Praying on Adobe's downfall because what the fuck pic.twitter.com/lDEX0NoZ8k
— 𝚏𝚊𝚛𝚡𝚒𝚢𝚘. (@hausofriya) June 7, 2024
No se puede obviar que Adobe había sido hasta ahora una de las empresas que con más prudencia había actuado en la defensa de los derechos de autor, defendiendo el uso ético de todos los materiales subidos a Adobe Stock. Sin embargo, esta medida ha alimentado un debate en el que la búsqueda de alternativas menos invasivas era la gran pregunta.
Rebelión en las redes y búsqueda de alternativas
Una de los comentarios más replicados en medios es el de Duncan Jones. El hijo de David Bowie y respetado creador cinematográfico (Moon, 2009) se dirigió en los siguiente términos a la empresa: «Estamos trabajando en una maldita película aquí y NO, no tenéis derecho así de repente a nada de lo que estamos haciendo porque os paguemos por usar Photoshop», según recoge la web Xataka. Aunque ahora no es posible encontrar esta publicación en el muro de X de Jones, sí se pueden ver la cantidad de invitaciones que su queja motivó para probar otras herramientas sustitutorias.
El desconcierto y enfado iban en aumento al descubrir, como le sucedió a Jones, que era imposible darse de baja sin aceptar los nuevos términos. La ventana de información que avisa de los cambios indica que: «al cerrar la ventana, no podrás seguir utilizando los servicios y aplicaciones de Adobe. Haciendo click en ‘Aceptar y continuar’ declaras haber leído y estar de acuerdo con los Términos de Uso».
Esta posible fuga de creadores es, sin duda, la que ha pesado en los despachos de la compañía californiana y que motivó un comunicado de comunicado de Adobe el pasado 6 de junio.
Sólo en caso de delito y en el marco de la ley
Esta aclaración se expresa en los siguiente términos, traducida del inglés:
«El objetivo principal de esta actualización fue ser más claros acerca de las mejoras implementadas en nuestros procesos de moderación. Teniendo en cuenta el auge de la IA Generativa y nuestro compromiso con la innovación responsable, hemos incorporado una mayor moderación humana a los procesos de revisión de las contribuciones de contenido.»
Y este texto nos remite a los puntos que soliviantaron las críticas. Lo que enconó los ánimos fue el contenido de los puntos 2.2 y 4.1, donde se afirmaba que a la herramienta se le daba acceso de revisión a los contenidos de sus usuarios «a través de métodos manuales y automatizados». En otro momento se explicaba:
«Nuestros sistemas automatizados analizarían tu contenido y fuentes de Creative Cloud usando técnicas tales como el machine learning para mejorar nuestros servicios y software y la experiencia de usuario.»
En su respuesta, Adobe ha insistido que esta revisión sólo se realizaría para combatir supuestas infracciones de la ley o contenido prohibido, especificando que, en el caso de Europa, siguiendo el dictado del Reglamento General de Protección de Datos. Con menos claridad se ha hablado de una segunda excepción.
Uso de contenido privado para entrenamiento de IA
Los términos de uso de Adobe siguen reservándose el derecho de revisión de contenidos en «casos muy específicos», e incluso se asegura que siempre previa información de su creador y acordando la licencia de uso que lo motiva.
Y aquí está la que probablemente sea la verdadera razón de la polémica, que no es otra que el entrenamiento de IA. La compañía explica que estas revisiones serán empleadas para mejorar la capacidad de respuesta de los algoritmos de la herramienta, pero deja entrever una práctica sobre la que se va hablar mucho en los próximos meses: el uso de contenido privado con estos fines.
Fuentes: El Español, Adobe, Xataka