La Cámara Alta de México quiere alcanzar un acuerdo para hacerse con los derechos de autor del escritor Octavio Paz, con el fin de publicar y difundir su obra de manera institucional. En este sentido, el Senado ha iniciado conversaciones con el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Ciudad de México, organismo que actúa como albacea y administrador del patrimonio del Premio Nobel de Literatura, al no existir otros herederos desde el fallecimiento de su esposa, en 2018.
Obtención gratuita de los derechos de autor
Con esta maniobra, el Senado pretende la obtención «a título gratuito» de los derechos de autor de las obras completas de Octavio Paz «para su reimpresión, publicación y difusión», señalan desde Milenio. «Para la Cámara de Senadores es una gran oportunidad, un privilegio, que pueda ser la titular de los derechos de autor de Paz», ha explicado el director general de Asuntos Jurídicos del Senado, Luis Genaro Vásquez. También ha añadido que «el DIF está muy interesado en colaborar». No obstante, la por el momento no se ha aprobado ningún presupuesto para asuntos editoriales, ha reconocido la secretaria técnica, Jani Galland.
La beneficencia pública, heredera de las obras
En 2019, después de que el matrimonio falleciera sin descendencia, un juez declaró a la beneficencia pública heredera universal de Octavio Paz y de su esposa, Marie José Tramini, «conforme a lo que establece el Código Civil», explicó Galland. Esta beneficencia está representada en la capital mexicana por el DIF, que desde entonces se convirtió en albacea del acervo de Paz. Tras la sentencia, este organismo creó un fideicomiso para la administración, conservación y difusión del legado del Premio Nobel, así como para la atención de sus derechos de autor en coordinación con la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.
Dudas sobre la competencia del Senado mexicano
Por su parte, el periódico Excelsior ha calificado como «inédito» este trámite «para quedarse con los derechos de autor» del escritor. La publicación advierte de que «el Senado no es una institución autorizada para recibir ingresos, porque su trabajo no es vender productos o prestar algún servicio público a la población», sino legislar. Y añade que poseer la propiedad intelectual de una obra «implica el pago de regalías por parte de quien haga uso» de ella.
Ausencia de testamento y declaración de monumento artístico
Octavio Paz falleció en 1998, veinte años antes de que lo hiciera su segunda esposa, la artista plástica Marie José Tramini, que expiró en 2018 sin testar. El escritor había tenido una hija de un matrimonio anterior, pero también falleció en 2014 sin descendencia, por lo que Tramini se mantuvo como albacea de los derechos de autor del Nobel hasta su óbito, publica France 24. En octubre de 2018, la Secretaría de Cultura declaró el acervo personal de Octavio Paz monumento artístico nacional.
La declaración abarca su archivo personal, que incluye manuscritos y textos mecanografiados, correspondencia privada, poemas, ensayos, artículos, traducciones y fotografías, además de su biblioteca, «con el objetivo de garantizar su preservación y evitar que salga del país». En aquel momento, algunas voces alertaron sobre la posibilidad de que la propiedad intelectual del escritor quedara en manos inadecuadas. Así, el experto César Benedicto, explicó en Excelsior que los titulares de los derechos de la obra de Paz, «que podrán prolongarse hasta 2098, cuando entre al dominio público», debían quedar claros, «antes de que algún vividor de la cultura encuentro el hueco legal por el cual colarse», recoge el canal francés de noticias.
Fuente: Milenio, Excelsior, France24.